martes, 28 de febrero de 2023

DOS FICUS EN EL CENTRO DEL BARRIO DEL CARMEN

El municipal y el de Raga desde la plaza.- 2023.- Esteban Gonzalo

En la plaza Centenar de la Ploma, esponjamiento del barrio del Carmen propiciado por las numerosas viviendas en ruinas después de las riadas del 14 de octubre de 1957 y muchos años de abandono posterior, hay dos ficus macrophylla, uno en el patio del ex Palacio de Raga, actualmente residencia y centro de día para mayores, y otro en zona municipal, pero tan cercanos, que conforman una gran copa verde.

El municipal, según l’Observatori Municipal de l’Abre de Valéncia (OMAV), es de la subespecie columnaris, tiene 174 años de vida estimada, 27,8 metros de altura, su copa 20,4 metros de diámetro N-S y 28 metros E-O, 15,6 metros de perímetro en su base, y 7,68 m. el del tronco a 1,30 metros de altura.

Perímetro base del municipal con raíces aéreas.- 2023.- Esteban Gonzalo

El de la residencia, según Carmina del Río, diario Levante-EMV del 16-07-2015, fue un regalo de Antonio José Cavanilles Palop a su amigo Francisco Martínez de la Raga, quien lo plantó en el huerto de su palacio en la calle Baja del Alfondech (actual Baja). Si fue así tiene más de 200 años, ya que el famoso botánico, ilustrado, científico y naturalista valenciano vivió entre los años 1745 y 1804.

Ficus de la Residencia Raga.- 2023.- Esteban Gonzalo

Como hipótesis, que antaño el huerto fuera más extenso y contuviera a los dos árboles. Dos ancianos, posiblemente los ficus más viejos de València, que respiran mejor, ya que también abrieron una plaza entre las calles Raga y Morella.

Ambos componen bella estampa verde en plena Ciutat Vella, saturada de edificios en estrechas calles. El de la residencia tiene la compañía de un alto pino en el patio tapiado, y el municipal su entorno está vallado para evitar que incívicos ciudadanos lo conviertan en pipi-can.

Desde la calle Morella. El municipal y el de Raga.-2023.- Esteban Gonzalo

Los ficus son de hojas perennes, y las raíces aéreas les ayudan a soportar su gran copa, máxime si están en zonas con tierra húmeda y poco compacta, y como ayuda para resistir los fuertes vendavales.

Texto de Esteban Gonzalo Rogel

domingo, 26 de febrero de 2023

TRANVÍAS Y CARROS EN EL RECUERDO

Archivo Municipal

Los puentes crecen, se ensanchan, porque se esponja la ciudad; en la urbe la servidumbre de sus calles necesitan de un mayor espacio para el deambular urbano de los ciudadanos, sea a su caminar ligero, bien en tranvía o en carro, tal y como lo hacen estos vehículos con sabor antañón, tanto en cuanto y en su abundancia, aunque cada vez y en menor número, se paseaban por las calles y puentes del cap i casal.

Tal y como se observa en esta foto de la primera parte del siglo pasado cuando el puente del Real presentaba un aspecto diferente al de su posterior ensanche, con su inauguración de nueva planta en 1968, y ya con dos tableros, alumbrado en su mediana por farolas de hierro, abierto a las necesidades de la circulación rodada de constante y mayor trafago.

El viejo tranvía que observamos en la foto se cruza con un par de carros que abandonan la ciudad nos deja una perspectiva entrañable con el apacible caminar de escasos peatones que seguramente van o vienen de los Viveros: los Jardines del Real, que al igual que el puente, toman su nombre en recuerdo de un tiempo muy antiguo, anterior a Jaume I, cuando la Valencia musulmana del siglo XI tenía instalada en su zona la casa de campo del rey Abd-al-Aziz, el monarca constructor de la muralla árabe.

Viejo tranvía que si bien está en el olvido, aún más lo están los carros que hasta la mitad del pasado siglo eran una estampa familiar en la vida urbana de la ciudad con diversos cometidos, siendo los más prolijos la unión con la huerta que surtía con abundancia sus productos, tanto a los mercados como a la dársena del puerto en su misión exportadora.

Puente vigilado por las atentas miradas de los dos santos Vicente, el Mártir y el dominico Ferrer, patrones de la ciudad, siendo éste último el que permaneció en su puesto de origen cuando la ampliación de su paso, con el retranqueo del primero para dar mayor anchura al puente construido en 1596 donde permanecen desde su posterior instalación a lo largo del siglo XVII.

viernes, 24 de febrero de 2023

SAN ISIDRO. IGLESIA PARROQUIAL DE NUESTRA SEÑORA DE LOS DESAMPARADOS Y SAN ISIDRO

IGLESIAS, CONVENTOS Y MONASTERIOS DE VALÈNCIA

En una lengua de terreno edificado entre el nuevo cauce del Turia y el contiguo terraplén ferroviario, junto a las cocheras Sur de la EMT, a la izquierda del puente del camino Nuevo Picaña, la CV-36, se encuentra la pequeña Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de los Desamparados y San Isidro, construida en 1902, y emplazada en la calle de San Isidro nº 2, en el barrio de San Isidro. Edificada entre medianeras tiene un bello campanario adecuado a su tamaño.

Nuevo cauce del Turia. Foto aérea de autor desconocido, entre 1960 y 1970, Remember-València, pg. 2056

Arriba, en la foto, tenemos la explanación para el nuevo cauce del Turia, Plan Sur, en la parte derecha está la Iglesia de San Isidro junto con unas casas, que aún existen. Detrás Mislata, más lejos Paterna, a la izquierda se ven Chirivella y Quart de Poblet. Podéis imaginar la cantidad de huerta desaparecida desde entonces, y eso que faltaban por realizar a ambos lados del cauce todos los carriles de la V-30.

Iglesia de San Isidro, vista actual. Foto E. Goñi, febrero 2019.

En contra de lo que aparenta el conjunto edificado junto a la Iglesia, que por cierto disfrutarlo solo cuesta un corto paseíto, tiene una antigüedad de entre 130 y 90 años. Pero la Iglesia recogió las tradiciones huertanas de la zona al poder sobrevivir del voraz ataque territorial del Plan Sur. Por ejemplo es el caso del Santísimo Cristo de la Fe, talla del siglo XVII que procede de la Capilla del desaparecido Molino de la Campaneta, lo mismo que su campana datada en 1767. Pasaron a la Iglesia junto con la tradicional romería al Cristo.

Romería al Cristo de la Fe, en 1952. Foto autor desconocido. Remember-València, pg. 1659.

Mármol recordatorio del Cristo. Foto E. Goñi, febrero 2019.

Asimismo la cruz que hay en el jardincillo ante la Iglesia es una recuperación de la desaparecida Cruz de Término, del camino Viejo de Torrent, que desde 1556 estuvo situada en el cruce del camino Mandingorra con el del Molino de la Campaneta, fue destruida en la guerra contra Napoleón, reconstruida y vuelta a desaparecer en la Guerra Civil, se rehízo y por última vez desapareció con el Plan Sur, la cruz se reconstruyó en el año 1975 y ahora está en el jardín, ante la Iglesia. Esta es la segunda Cruz de término de la que recuperamos su memoria desde “Valencia en Blanco y Negro”´.

Cruz rememorando la desaparecida Cruz de Término del camino Viejo de Torrent. Foto E. Goñi, diciembre 2021

Tenemos en la siguiente foto lo que podríamos llamar la Partida de Nacimiento de la Parroquia en una bonita composición cerámica de seis azulejos fijada en la fachada en 2002, conmemorativa de su centenario.

Cerámica en fachada. Foto E. Goñi, febrero 2019.

Para visitar la Parroquia de San Isidro recomiendo como siempre la bici, se puede utilizar el paso subterráneo a la derecha del puente, que lleva a las cocheras de la EMT, o bien pasar andando por la parte izquierda por bajo del terraplén ferroviario. Para la visita a pie se recomiendan las líneas de la EMT nº 72 y 73.

Texto de Enrique Goñi Igual

miércoles, 22 de febrero de 2023

VICENTE BLASCO IBÁÑEZ Y EL CINE - II

Blasco Ibáñez y su "Sangre y arena" llega a los cines de todo el mundo.

Una novela escrita por Blasco Ibáñez en 1908, que trata el tema taurino con excelencia, fue "Sangre y arena".

La trama que discurre a lo largo de esta novela supuso poner en bandeja al mundo del cine un duro relato que dio pie para confeccionar hasta cuatro distintos argumentos que se materializaron en cuatro diferentes películas, que si bien mantienen su mismo título, las cuatro con mayor o regular éxito han tenido su particular recorrido de calidad y éxito. Todas ellas se han rodado durante los años 1916, 1922, 1941 y 1989 del pasado siglo.

VERSIÓN 1916

La primera versión cinematografiada de "Sangre y arena", fue dirigida por Vicente Blasco Ibáñez y Max André en 1916, a cargo de la productora Prometeo, con una duración sesenta y cinco minutos en blanco y negro, en silente; el reparto de actores corrió a cargo de María Luisa Alcaide, Mark Andrews, Matilde Domenech, José Portes. Podemos añadir que la Filmoteca de Generalitat Valenciana ofrece poder ver un tráiler de esta película por internet: Sangre y arena 1916.

VERSIÓN 1922

La segunda versión de "Sangre y arena" 1922 corrió a cargo de la industria norteamericana, que no dudo en proporcionar los medios que requería una obra potente como le corresponde a la Paramount Picture, que puso en manos la dirección de Fred Niblo, y un reparto excepcional compuesto por un novel y jovencísimo Rodolfo Valentino, que en este film logró colocarse como el galán de moda de Hollywood, Nita Naldi, Lila Lee, Walter Long, Rosa Rosanova. Con una duración de ciento diez minutos tambien rodados en cine silente. De esta película comentó la critica que resultaba llamativa la excelente fotografía en blanco y negro, llena de contrastes y la ambientación, con unos decorados muy dignos para la obra de Blasco Ibáñez. Pasados los años, no deja de extrañar que la película se rodara en un granero a la vista de su perfección técnica.

Cuenta una leyenda que fruto del trabajo y resultados de este film, que entre Braco Ibáñez y Rodolfo Valentino se establecieron ciertos vínculos de amistad que duro el resto de sus vidas.

Esta versión también se puede visionar en interne buscando: Google Sangre y Arena 1922.

VERSIÓN 1941

Otra diferente versión, la tercera de la colección, rodada en 1941, obtuvo dos nominaciones y con un Oscar a la fotografía. Esta nueva versión producida también en Hollywood contó con especial reparto lleno de estrellas. Es quizás la película de toreo más recordada de todos los tiempos. La compañía "20 th Century Fox" no escatimó nada para lograr un éxito mundial con su particular "Blood and Sand", de ciento diez minutos, contó para ello con un buen puñado de dólares, además, con el experto director de cine Rouben Mamoulian, que dispuso de un reparto espectacular: Tyrone Power, Linda Darnell, Rita Hayworth, Alla Nazimova, Antony Quinn, J, Carrol Naish, John Carradine… entre otros más. El guión de Jo Swerling, sobre la novela de Vicente Blasco Ibáñez, así como las oportunas adaptaciones. Música: Alfred Newman, Fotografía a cargo de Ernest Palmer, Ray Rennahan que obtuvieron el premio Oscar a la fotografía 1942, así como la mención al Oscar ese mismo año al diseño de producción. Esta versión de Sangre y arena se estreno en Madrid en 1949. Se da el simpático caso que en el mismo año 1942 que se estreno "Sangre y arena" en Norteamérica, Cantinflas rodó en México la parodia: "Ni sangre y Ni arena" de Alejandro Galindo (1941) que por lo visto tuvo excelentes éxito de público.

VERSIÓN 1989

Sangre y Arena, todavía y hasta ahora ha tenido una versión más, la cuarta, en esta ocasión se rodó en el año 1989 y también participó Hollywood mediante la primordial intervención en coproducción del convenio de la "20 th Centure Fox" y la productora española José Frade P.C. 

En ésta nueva versión la dirección corrió a cargo de Javier Elorrieta, adaptada por Rafael Azcona y Ricardo Franco, protagonizada por Christopher Rydell, Sharon Stone, Ana Torrent, Antonio Flores, Guillermo Montesinos, José Luis Villalonga; la música corrió a cargo de Paco de Lucia y Jesús Gluck. La película se rodó en Granada íntegramente en ingles, posteriormente para su estreno en España los actores tuvieron que ser doblados. El estreno de esta versión fue el 22 de septiembre de 1989 en el cine Callao de Madrid y posteriormente en otros países.

Texto de Miguel Tejedor
*VALENCIA VIVE EL CINE

(Continuará)

martes, 21 de febrero de 2023

1960 - EL NIÑO QUE ROBÓ UN MILLÓN


1960 - EL NIÑO QUE ROBÓ UN MILLÓN

Una película que nos lleva a la "Valencia en blanco y negro" de 1960 recorriendo lugares emblemáticos de la ciudad, con un protagonista que personifica la inocencia de un tiempo lejano.  

lunes, 20 de febrero de 2023

RECUERDOS DE CASA BARRACHINA DE LOS 50 EN VARIOS PÁRRAFOS

 

Interior de casa Barrachina. LP

“No recuerdo si esta vez al llegar a Valencia sentí primero el incienso del Patriarca después de atravesar el frescor del zaguán donde reptaba el dragón por la pared, o fue el apestoso olor a mantequilla caliente de Barrachina, ya que los dos lugares visité el mismo día en busca de confesión con el padre España y de la compañía de aquella prostituta que quería llevarme a la lucha libre. A los dos seres encontré en su sitio. El padre España estaba en el primer confesionario entrando a la derecha y la China se hallaba sentada a la misma mesa en el altillo de la cafetería con la mandíbula apoyada en un puño” […] “Caía sobre Valencia un crepúsculo amoratado y todo el neón crepitaba en la cafetería Barrachina donde Bola primero se comió dos bocadillos de blanco y negro hechos con butifarra y longaniza.”


“Yo iba muchas tardes a la cafetería Barrachina y me enredaba frente a un yogur batido con aquella chica que hablaba del más allá sin dejar de mirarme con una dulzura muy profunda. La veía sentada a un velador esperando y mientras subía por la escalera de mármol hacia la rotonda a veces ya no sabía si yo era el hijo del fabricante de zapatos muerto en accidente que acudía a una cita con su novia o era un simple mortal que no había muerto todavía y que solo buscaba seguir hasta el final un juego excitante.”

Tranvía a la Malvarrosa. Manuel Vicent

Ofrenda en día de fallas por delante de Casa Barrachina

Considerada como la Capilla Sixitina de la gastronomia valenciana durante décadas, era la parte más emblemática del establecimiento. El lugar más visitado por los valencianos desde su instalación en el edificio situado entre las calles Sangre y En Llop. Y de la popular Casa Barrachina se servía Manuel Vicent para con su pluma dar "un viva" a todo el encanto, bullicio y vida que por su interior transitaba en la mayor parte del día, desde el burgués adinerado al simple ciudadano de a pie, quienes en sus barras hallaban o bien un helado para remediar el calor de agosto,  o bien los buñuelos de San José. Caramelos, jamones, refrescos, conservas, bocadillos, buena mesa y mantel, un servicio esmerado que un día cerró sus puertas y nos dejó huérfanos a los valencianos.

Texto de Amparo Zalve

sábado, 18 de febrero de 2023

OLGA GALICIA POLIAKOFF

 Olga Galiana Poliakoff en la calle la Corona.-2022.- Esteban Gonzalo

En la calle de la Corona, en la pared medianera este del edificio del número 27, construido en el año 1800, destaca desde julio del 2013 la gigantografía sobre lona de 7,5 x 5 metros de la que fue bailarina, coreógrafa y profesora de ballet, Olga Galicia Poliakoff, artísticamente Olga Poliakoff, muy vinculada al centro histórico de València, aunque nació en Bata, capital de la entonces Guinea Ecuatorial Española, cuando su padre tuvo allí su actividad laboral.


Cartel publicitario del cortometraje.

La gran fotografía fue realizada por Luis Montolio con el aporte peculiar de Javi Soria (Visori) entremezclando bombillas en su pelo, tal vez para demostrar su vitalidad y entereza para superar problemas. El principal, un atropello que la dejó inútil para actuar como bailarina. Cuando tras larga recuperación lo superó montó Nou Pernil Dolç en el número 4 de la calle Juristas, local nocturno donde se reunía la intelectualidad de la época, calificada undergraund. Lo regentó, realizando actuaciones cuando le apetecía, hasta su fallecimiento, de un derrame cerebral y a los 57 años, vividos con intensidad, el 22 de noviembre del año 2008.


Olga Galiana Poliakoff fotografiada por su hermano David.

Fue hija de Olga Poliakoff, bailarina y coreógrafa que renovó la danza contemporánea con escuelas en las calles Conde Altea y Turia, y nieta de Vladimir Poliakoff, ucraniano que junto con dos hermanos vendían marroquinería en los mercadillos de la provincia de València, y en Alberic conoció a Vicenta, con quien se casó y tuvo dos hijas, Sara y la mencionada Olga Poliakoff.


Exterior del bar.- sr marmota grapfic.

Los siguientes gestionadores mantuvieron la abigarrada decoración interior, y la exterior con dibujos de sr. marmota graphic. Después años cerrado, y sin adornos añadieron recientemente el local a un vecino restaurante.


Nou Pernil Dolç.- Foto autor desconocido

Sobre la vida de Olga Galicia Poliakoff realizó Eva Vizcarra en el año 2011 un cortometraje con el título “La mujer que nació en bata”, haciendo un juego de palabras con su lugar de nacimiento. Fue premiado como mejor cortometraje documental en Euro Film Festival 2011 y premio Tirant Avant en el Festival de l’Audiovisual i les Noves Tecnologies del mismo año.


Escenas del cortometraje

Vida de una bailarina, coreógrafa y profesora de ballet que junto con la de su familia está ampliamente relatada en la larga entrevista que el periodista Fernando Miñana le hizo a su hermano David y publicó el diario Valencia Plaza el 6 de diciembre del 2020.

El fotógrafo Luis Montolio reparte sus estancias entre su Londres natal y València.

Texto de Esteban Gonzalo Rogel

jueves, 16 de febrero de 2023

El ADIOS DEL MARQUES DE CAMPO A EMILIO CASTELAR


1932 - Foto de Enrique Desfilis

La plaza Castelar tenía su encanto. El Marqués de Campo contrarresta la palmera y en un día invernal los paseantes fijan su atención al monumento del personaje valenciano que como Alcalde de la ciudad durante cuatro años (1843/47) y siempre como su principal objetivo, el de contribuir a dotar a la ciudad de los más importantes adelantos de la época, como lo fueron el ferrocarril, el alumbrado a gas, el adoquinado y las obras de caridad, iniciativas del Marqués que están representadas mediante imágenes en los cuatro lados de la base monumental.

Los kioscos chino dan vida a la plaza cuando transcurrían los días de 1932, año que a su final se iniciaron las obras para el traslado del monumento a su nuevo emplazamiento de la plaza Cánovas de Castillo, que lo sería en los primeros meses del nuevo año.

Con la remodelación de la plaza Castelar iniciada cuando terminaba la década de los veinte, se nos acredita por la foto la rapidez con la que se efectuaron las obras con el resultado de un friso de nuevos edificios que abarca -ejecutado desde 1930 y en un par de años- desde el de “Casa Barrachina” (el primero a la izquierda) hasta el de los “Almacenes Rey Don Jaime” de la calle San Vicente, tal y como se observa en la foto de Enrique Desfilis, con su chaflán al fondo de la conocida popularmente como “Finca del Porquero”, quizá el trazado más exuberante de la nueva plaza, donde la “Bajada de San Francisco” nos iba a quedar anclada para el recuerdo.

Eran ya los últimos días del Marqués de Campo presidiendo la plaza, y quizá la expectación que despiertan para los paseantes allí congregados, era la de su despedida cuando finaliza el año de 1932.

martes, 14 de febrero de 2023

VÍAS METÁLICAS PARA CARROS - 16

Puente del Ángel Custodio y Eduardo Boscá

Este puente fue proyectado en plena posguerra en 1941 por el Ayuntamiento. Comenzó su obra en 1943. De igual amplitud que el puente de Campanar, 15 metros, fue también dotado de planchas para carros. En este caso se incluyó también la urbanización del tramo del Camino de Tránsitos correspondiente a la avenida Eduardo Boscá, incluyendo las vías metálicas para carros, para realizarlo igual que todo el resto de Tránsitos y dar así continuidad a Cardenal Benlloch. Debido a todos los problemas y carencias de suministros en nuestra triste posguerra, tramo y puente fueron puestos en servicio tardíamente ya en 1949. Por lo que no figuran en el plano Catastral 1929-1944.

En el momento de su inauguración automáticamente pasaron a no tener uso carretero tanto el puente de Aragón como la av. de Jacinto Benavente, por lo que les fueron retiradas a ambos las planchas metálicas para carros.

Vista del puente ca 1950. Foto autor desconocido. Remember-València, pg 259 (III)

Pocos años más tarde cuando se realizó a través del Camino de Tránsitos la unión de las entradas norte y sur de València para intentar mejorar el tapón en el tráfico pasante de norte a sur de la ciudad, entonces todavía sin bypass. La época en que Valéncia fue para los turistas que iban hacia el sur desde los Pirineos lo que entonces denominamos “el semáforo de Europa” Al mismo tiempo se decidió ampliar el puente del Ángel Custodio a 30 metros, trabajo que conllevaba la eliminación de las vías de carros, y así eliminar un cuello de botella para el tráfico pasante, obra que se acabó en 1967.

Vista del puente recién ampliado, 1967. Postal de época.

Fueron muy pocos los años de servicio carretero, dieciocho, pero muy bien aprovechados por la disminución de recorridos entre la av. del Puerto y la av. Peris y Valero gracias al nuevo tramo de Eduardo Boscá y puente del Ángel Custodio puesto en servicio.

Texto de Enrique Goñi Igual

domingo, 12 de febrero de 2023

VICENTE BLASCO IBÁÑEZ Y EL CINE - I

 

VALENCIA de CINE


Con esta sutil sentencia dejó muy claro don Vicente, su importante recorrido por la industria cinematográfica: 

"Puede uno, gracias al cinematógrafo, ser aplaudido en la misma noche en todas las regiones del globo... esto es tentador y conseguirlo, representaría la conquista más enorme y victoriosa que puede coronar una existencia".

El cine fue para Blasco el sólido armazón que le facilitó fama y prestigioso reconocimiento mundial. Blasco manifestó las posibilidades que le ofrecía el cine al comprobar cómo este nuevo invento ocupaba en todo el mundo un lugar hegemónico y privilegiado para consumir el tiempo dedicado al ocio y entretenimiento de la moderna civilización postindustrial. 

El interés y el entusiasmo de Blasco por el cine fue de tal intensidad que llegó a participar de forma directa en numerosas películas que se rodaron basadas en su obra literaria. Lo hizo desde diferentes posiciones, en alguna de ellas fue el productor, en otras, guionista o director, pero en todas aquellas donde contribuyó en su elaboración, participó, por supuesto, imponiendo su opinión. Fue una lástima que no encontrara un papel donde poder encuadrase como actor, podemos estar seguros que lo hubiera bordado.

La primera incursión en este nuevo arte de la narrativa de Blasco lo aporta una producción de la valenciana casa Cuesta, que se cargó de convertir en película su conocido cuento valenciano: “Demonio,” que se rodó bajo el título de El tonto de la huerta (1913).

Con la producción de ésta película de hace un siglo se originó el punto de partida de la eficaz y cabal trayectoria de Blasco Ibáñez en el mundo del cine. Como creativo voraz, veía en el cine una rápida forma de rentabilizar y popularizar su obra literaria. Puesto a ello, Blasco, siempre pensando en los ingresos, no tardó en poner en marcha una nueva producción en 1914, lo hizo con su popular novela Entre Naranjos, bajo la dirección de Alberto Marro, pero para ello cuidó de adjudicarse para él, las funciones de codirector y el control de ventas.

Algunas obras de Blasco Ibáñez han sido objeto de su adaptación al cine, aprovechando la capacidad literaria del autor valenciano para el melodrama y el folletín, muy al gusto del cine español o del hispanoamericano, pero también del agrado del norteamericano y por ello, la gran productora Metro Goldwym Mayer apostó por la obra de Blasco.

La importante productora norteamericana, sin lugar a dudas, fue la responsable de su excepcional fama universal. El interés de la Metro por la obra del autor valenciano en los Estados Unidos fue tal que entre otros importantes honores fue investido Doctor Honoris Causa por la Universidad George Washington.

(continuará) 

Texto de Miguel Tejedor 
*VALENCIA VIVE EL CINE

viernes, 10 de febrero de 2023

ENTRADA AL NUEVO PALACIO DE COMUNICACIONES


Atrás había quedado el antiguo Barrio de Pescadores y en su solar dando a la plaza de Emilio Castelar, después de tardar siete años en su construcción, se acababa de inaugurar el Palacio de Comunicaciones, aunque ya están hablando de él, popularmente, como Edificio de Correos .

 
 Fachada principal en construcción

Habíamos visto pasar andamios, cristales, puertas, hasta columnas durante todos esos años, y había llegado el momento en el que en el año 1923 íbamos a poder situar en su lugar lo imaginado ya con seguridad.

 
 Colocación de una columna en la sala ovalada

En la fachada principal nos reciben tres puertas de gran altura por la que pasamos a un vestíbulo con un artesonado octogonal de madera que cubre el techo. Pero quería ver por fin la tan comentada sala ovalada, en realidad había acudido más que nada por esta cuestión. Para ello había que atravesar este vestíbulo y pasar a través de unas trabajadas puertas de madera y cristales, y por las que a través de ellos ya se dejaban ver unas altas columnas.

 
 De vestíbulo a sala ovalada

Dieciocho columnas de mármol conté en un espectacular espacio ovalado que anuncian la solidez y el poder de la entidad estatal. Los materiales más nobles con las instalaciones más modernas. Todos los visitantes de la primera mitad del siglo XX quedamos envueltos de una arquitectura que había nacido para servicio de la comunicación y del Estado.

Me situé al centro de la sala donde me rodeaban dieciocho columnas de mármol estilo jónico, que siguiendo hacia arriba sostienen a dos pisos altos, terminando el segundo con dieciséis arcos de medio punto.


La estancia está cubierta por una gran claraboya por la que entra la luz. Está hecha de hierro y cristal, de vidrieras de diferentes colores. La configuran un total de 370 paneles y unas 3500 piezas de vidrio emplomado. Un respiradero se oculta en el centro mediante un escudo de la ciudad hecho de zinc y latón, acompañado de cartas lacradas y rayos telegráficos. Mirando el perímetro exterior se aprecian las provincias españolas a través de sus escudos. Pensemos que se relaciona con la representación de la unión territorial y social de la España de esta época. Bajo de unos de estos escudos se puede leer el taller donde fue realizada, y fue en Madrid, en el taller de los Hermanos Maumejan .

 
 Mampara divisoria en oficinas

“En la planta principal se han dispuesto los despachos de oficinas y negociados de Correos para los srs. Inspector Regional y Administrador Jefe, Secretaría, oficinas de la inspección, etc, quedando amplios locales disponibles, así como en Telégrafos para los diversos negociados y despachos que en la planta figuran, quedando también locales disponibles”.

Texto de Amparo Zalve

miércoles, 8 de febrero de 2023

JAIME I Y EL FICUS EN EL PARTERRE

Parterre.- Proyecto 1860.-AHMV

Son los dos iconos del recoleto jardín realizado a partir de mitad del siglo XIX, cuya distribución y tipología fue reformada después de los destrozos causados por las riadas del día 14 de octubre de 1957. Las cenagosas aguas desbordadas del río Turia alcanzaron allí 3,20 metros de altitud, ya que es el lugar más bajo del espacio interior que estaba contorneado por cinco kilómetros de murallas.

El ficus es un abuelo de 171 años que salió cuando lo plantaron por error confundiendo su semilla con las de los 47 magnolios que plantaron en 1852 contorneando el jardín realizado en la plaza Príncipe Alfonso, resultado del derribo de varias manzanas de viviendas por el Mariscal Louis-Gabriel Suchet en la corta etapa de dominio napoleónico entre el 14 de enero del año 1812 y el 5 de julio del año siguiente. También plantaron dos araucarias, pinos canarios y dos pisántropos metrosidros.

 Postal plaza Wilson

Para ello fue aprobado el proyecto presentado el 14 de noviembre de 1860 (a) por el arquitecto Sebastián Monleón Estellés para un jardín ligeramente trapezoidal, con cuatro estanques circulares, una gran fuente central en derredor del pedestal que en 1891 acogió la estatua ecuestre de Jaime I, una pajarera, un quiosco y la caseta del guarda. No construyeron la fuente central, como tampoco la alberca, denominada ría, la pajarera y el kiosco en el saliente noroeste. En ese lugar estuvo entre los años 1869 y 1879 el Teatro-Circo y después la caseta del guarda, con dos ampliaciones a partir de 1934 y tres destinos desde 1923 (valenciaenblancoynegro.com 31-01-2015). Además, según información de Julio Cob a partir del uno de enero de 1894 y durante un año fue destinado a Casa de Socorro mientras construían la sede definitiva en La Glorieta.

Antes de 1957

El ficus es el monumento vegetal que en junio del 2021 se libró, después de un cuarto de siglo de lentos procesos administrativos, de la instalación para venta de carburantes, pero está a la espera de la inertización y extracción de los dos depósitos, descontaminar si fuera necesario el terreno, supresión del pavimento y la acera, y tras desmontar las desencajadas bancada, respaldos metálicos y escalera, recolocarlos más al norte y dejarle cómodo espacio para el árbol. Aunque en Parques y Jardines son partidarios de llenarlos de arena y dejarlos.

Foto aérea reciente de Google Earth

Monumento vivo, que además de la rotura de una gruesa rama el 8 de noviembre del 2015 y otra el siete de septiembre del 2022, ha tenido otros percances a lo largo de su larga historia de más de siglo y medio, siendo muy grave la rotura de tres ramas por el huracán del 26 de diciembre de 1926. Furioso vendaval que en València arrancó casi un centenar de árboles y ocasionó numerosos daños en otros, como también en edificios, infraestructuras y campos de cultivo. Sin embargo, sólo los diarios La Correspondencia y El Pueblo reseñaron los daños en el ficus del Parterre, ya que era considerado un árbol más. Sin embargo, tuvo suerte con el huracán del 25 de febrero de 1989, que con vientos de hasta 117 km/h ocasionó múltiples destrozos agrícolas y urbanos, y lo que es peor cinco muertos y muchos heridos en València y otros municipios de la Comunidad Valenciana. Fue tal su furia que arrancó más de un centenar de pinos en El Saler (b).

Las dimensiones del ficus son colosales: 22,70 metros de altura, 12,95 de perímetro a 1,30 m. de altura, 40,3 m. de diámetro de copa norte-sur y 35 en sentido este-oeste, que cubren una sombra de 850 metros cuadrados. Según OMAV un poco inferiores a las medidas en el año 2017 antes de la gran rama rota en el 2022.

Alberca con el dios Neptuno.-2022.- Esteban Gonzalo

Y en el centro del jardín el monumento al Rey conquistador, al que cada 9 de octubre se le homenajea acercándole la Senyera, institucionalmente desde 1982. En el día donde antes los habitantes de la ciudad de València, pero ahora también de otros municipios de la Comunidad, regalan, principalmente a sus novias o esposas, la mocadorá.

En la Guía de Valencia del año 1925 especifican en el apartado a Jaime I el Conquistador, que su monumento ecuestre, inaugurado el 20 de julio de 1891, fue realizado por Agapito Vallmitjana, escultor catalán que para su realización utilizó el bronce de cinco cañones y un obús del castillo de Peñíscola. Fue fundida en la Maquinista Valenciana y tuvo un coste de treinta mil pesetas. El escultor valenciano José Aixa fue el autor de los escudos del Rey de Aragón y de la ciudad de Valencia colocados en los lados norte y sur del pétreo pedestal sobre el que está el monumento con el rostro del Rey orientado al norte, de donde vino. Además, en el lado este una lápida sobre el 9 de octubre y otra en el oeste con la dedicatoria e inauguración del monumento.

El ficus en el año 2016.- Esteban Gonzalo.

Tras la riada, con los árboles salvados, diseñaron un jardín moderno con una alberca oblonga en el extremo sureste a la que trasladaron, desde la Glorieta donde había estado en una gruta artificial, una estatua de Neptuno esculpida por Ponzanelli. Instalaron tres surtidores de agua en su derredor y pequeños pulverizadores contorneando el pedestal.

Jacobo Antonio Ponzanelli fue al autor de las esculturas que tenía el Canónigo Pontons en su alquería de Arrancapins y adquirió el Ayuntamiento de València para embellecer jardines.

El jardín desde la calle Pintor Sorolla.- 2022.- Esteban Gonzalo

Según el escritor Lisard Arlandis en Valencia Atracción noviembre de 1983, cuando trazaron el nuevo jardín “Sustituyeron el pedestal de la estatua del Conquistador por otro de base más estrecha y mayor altura, con lo que la escultura ganó en esbeltez y perspectiva”.

Las cuatro albercas circulares del antiguo Parterre, con un remate de piedras del que salía un chorrito y plantas acuáticas, después de 1957 fueron reaprovechadas para el jardín construido sobre la mayor parte del estacionamiento subterráneo en el lugar donde estuvo el palacio de Parcent. Digo parcialmente, ya que pudo más la especulación inmobiliaria para levantar un alto edificio intermedio entre el jardín y la avenida del Oeste.

El jardín desde el norte.- 2022.- Esteban Gonzalo

El 16 de marzo de 1901 (c) la Corporación Municipal de València acordó colocar en el banco de piedra que contornea el Parterre la verja de hierro que servía anteriormente como respaldo a los bancos de la Glorieta.

Famoso antaño por la gran afluencia de las cuidadoras con niños y a su encuentro los soldados, tanto antes como ahora el jardín es lugar de asueto, principalmente para tomar las personas mayores el calor de los revitalizadores rayos del astro rey en los meses frescos y fríos, y en verano aprovechando la sombra de los árboles. Embellecimiento urbano, descanso, y ayuda contra la contaminación de la circulación rodada.

En la foto aérea, gentileza de Google Earth, destacan: el ficus en el noreste del jardín y el magnolio superviviente en el extremo suroeste.

Plaza de toros en el plano de 1831

Plaza con gran baile de nombres en su larga historia de dos siglos. Inicialmente de la Aduana (1812), y después: de la Milicia Nacional (1841/1844), de Juan Álvarez Mendizábal (1868/1874), Príncipe Alfonso (1857/1868, 1875/1918, 1923/1931), Wilson (1918/1923), Ausiàs March (1931/1939) y Alfonso el Magnánimo desde 1939.

Plaza de la Aduana en la que hubo una plaza de toros, como se puede apreciar en el plano de 1831.

Un jardín a seguir mimando, teniendo en cuenta que “está en la parte más honda de la ciudad (Riada hasta 2,80 metros) y la galopante deshidratación del suelo está alterando la vida de los grandes ejemplares de siglos pasados” según la Guía de Jardines Históricos y Parques Urbanos de Valencia, editada en el 2009.

(a) AHMV.- Sección III, Subdirección Aguas Potables, año 1860, caja 3 y expediente 130.

(b) Observatori Municipal de l’abre de València (OMAV)

(c) El Mercantil Valenciano 19-03-1901

Texto de Esteban Gonzalo Rogel