1917 - La ola de frío que invadió la península durante ese
invierno fue una de las más duras del pasado siglo. En el interior se
alcanzaron los -20º congelándose buena parte de los ríos castellanos.
Verdaderamente fueron unas navidades heladas.
El 29 de diciembre la Universidad de Valencia registró
-2,0º, al día siguiente cayó la nieve sobre la capital del Turia sorprendiendo
a sus habitantes y alcanzando los 4 centímetros de espesor.
El fotógrafo apellidado Vizcaíno, que vivía en entresuelo
del número 354 de la avenida del Puerto, fue requerido por José Darocha Trullente
para que inmortalizara aquella nevada en los muelles de Valencia.
Texto y fotos de Paco Mañez
Todo un tesoro estas fotografías.
ResponderEliminar¡FELIZ AÑO NUEVO!
Saludos desde Valencia, Montserrat