En el bajo nº 43 de la avenida del Oeste de València, esquina a la calle Grabador Selma, está la empresa artesana donde Fernando Navarro Ribero y los hermanos José y David Alabadí Cabrelles se dedican a fabricar y comercializar joyería tradicional, en especial para participantes en festejos alicantinos, castellonenses y valencianos. Son famosos por sus aderezos, medallones, peinetas, pero también aditamentos y regalos para novias, comuniones, cumpleaños,…. Obras de arte en las que también intervienen Bea Chisbert y María Jesús Martínez, esposas de José y David, respectivamente.
Les satisface que sus aderezos los luzca la máxima representante fallera de València y su Corte de Honor, con la particularidad que en este raro ciclo fallero 2020-2021 han realizado varios juegos para la Fallera Mayor, Consuelo Llobell Frasquet. Dos de ellos muy peculiares: uno utilizando vidrio reciclado, fruto de la colaboración con Ecovidrio, el diseñador Kliper Dávila y Vidrios Sorribes, y el otro,teniendo como modelo el óculo de la puerta de los Apóstoles de la Catedral de València, diseñado por los joyeros de Art Antic en colaboración con Antonio Llobell, también joyero y padre de la Fallera Mayor.
José Ballester López montó en 1950 un taller de orfebrería en Burjassot, y como no tuvo continuadores en sus hijos, que eligieron otros caminos laborales, en el año 1989 crearon una sociedad sus empleados, quienes continuaron allí hasta que en el año 2010 trasladaron taller y tienda al centro de València.
Su profesionalidad y la calidad de sus obras artesanas fueron refrendadas con premios de la Cámara de Comercio de València en los años 1986, 1992 y 2009.
Consultar su catálogo es ver una larga retahíla de maravillosas joyas, y poner en un brete al comprador sobre la elección.
Texto de Esteban Gonzalo Rogel
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