Archivo Rafael Solaz
1908 - El primitivo Café La Habana se hallaba en el barrio de
Pescadores. Con motivo de los derribos producidos en este lugar el entrañable
café tuvo que trasladarse a la esquina de las calles Poeta Querol y Pintor
Sorolla, edificio propiedad de Francisca Navarro.
El nuevo salón, que
funcionó como restaurante y cafetería, estaba regentado por Antonio Fornés,
quien encargó la decoración de tal establecimiento al artista Antonio García y
según crónicas de la época ofrecía un amplio salón que honraba su buen gusto y hacía
honor a la ciudad, enriqueciendo su industria y dando vida a un gran trayecto
(calle de las Barcas) que anteriormente tenía la frialdad que solían tener
siempre las calles señoriales.
En la imagen su interior. En el recuerdo su imagen.
Texto: Rafael Solaz
Qué emoción haber encontrado esto. Antonio Fornés era mi tatarabuelo y durante años, mi bisabuela, abuela, quienes emigraron a Argentina en 1928, y madre han preparado la paella con su receta. Hoy yo sigo practicando para que un día me salga el arroz como lo hicieron mis antepasados.
ResponderEliminarSoy Antonio Requeni Fornes, nieto del dueño del Café Habana, no se quien es Rafael Solaz, que se dice tataranieto. Me gustaría comunicarme con él, Mi mail es vcr-vcr@hotmail.com.
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