Dentro del extenso programa de “festes de carrer” que existía hasta la Valencia decimonónica, la festividad del Porquet, de San Antonio Abad, (patrón de los animales y en su imaginería acompañado de un cerdo, de ahí el nombre de la fiesta) es de las pocas que han llegado a nuestros días.
De gran tradición popular en la barriada de Sagunto, es también el primer “porrat” del año, al que se sumarán otras celebraciones. Fiesta tradicional y de gran arraigo popular en muchas localidades valencianas, la de Valencia ciudad, tiene la particularidad de que a la bendición de los animales acuden gentes de otros pueblos que también celebran la misma festividad.
Su origen se remonta al siglo XIV con la llegada de los frailes antonianos, quienes construyeron en la zona una ermita y un hospital. Para el descanso de los peregrinos que allí acudían y ante el portal de la ermita y junto a un pozo, los frailes plantaron un olivo que con los años iba a tener gran importancia en la celebración de su día festivo, manteniéndose viva tan antigua tradición.
Cuenta la tradición que los peregrinos tras tomar sus aguas, tomaban una rama que fijaban en las monturas de los caballos procediendo a dar vueltas al olivo. Esta costumbre se mantuvo hasta mediados del siglo XVIII cuando por obras en el edificio se tuvo que talar el árbol.
Pero no la festividad de San Antonio Abad en la calle Sagunto, que se ha mantenido en el tiempo cada vez con mayor intensidad a la que acuden los simpatizantes, fieles a la tradición, con sus caballos enjaezados así como portando animales domésticos para recibir la bendición del párroco.
¡ que bonita la foto! Y que bonitas también las tradiciones que cuentas. Yo iba con mis padres cuando era pequeña. Hace tantos años.... Viendo lo que públicas cada día, siento nostalgia, pero de la buena, recordando cosas muy queridas.
ResponderEliminarGracias Julio