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martes, 18 de febrero de 2014

UNA TIENDA MÁGICA E INMORTAL, LA DE LAS OLLAS DE HIERRO

tienda de las ollas

1893 - En los alrededores del corazón de Valencia se encuentra una tienda que todavía conserva su vestigio y el sabor intacto de otras épocas. Al entrar parece que no ha transcurrido el tiempo desde su fundación, nada menos que en 1793 y desde entonces está protegida con una talla de San Vicente Ferrer del siglo XVIII.

Se trata de la “Tienda de las Ollas de Hierro”. Se halla en la calle de los Derechos, junto a la Plaza Redonda, su emblema es el que se muestra en la fotografía: dos leones rampantes alados que sostienen entre sus patas dos ollas, representantes del original género que nombró el local, que ha día de hoy todavía conserva su mobiliario original de la época, con sus estanterías de madera, sus cajones, sus amplios mostradores y su suelo hidráulico de damero, como si fuera el tablero de un gran ajedrez.

Sus orígenes provienen de una familia franca que llegó a Valencia huyendo de la Revolución Francesa de 1789, y que se dedicaba al comercio de ollas de hierro fabricadas en Marsella, y tuvo bastante éxito su comercio en nuestra ciudad.

Postal las ollas
El primer propietario valenciano, fue Miguel Gómez Prósper, hecho corroborado en la Guía Biográfica Comercial de 1893 y en un folleto que imprimió la tienda para celebrar su centenario.

Sería en 1916 cuando Manuel Reig Bonell registró el nombre de la tienda, que ostenta a días de hoy. Años posteriores, en 1944, los hermanos Virgilio y Mariano Pérez Martínez dedicaron la tienda a la venta de objetos religioso y de costura. Aparecería un nuevo folleto publicitario a color en cuyo dorso, describirán los nuevos artículos.

En la década de los noventa, tras el fallecimiento del último de los hermanos, Mariano, el negocio pasó a su hermana Rosario que llevó el local hasta su jubilación junto a su sobrino Miguel Almenara Pérez, cuyo hijo, Jesús Almenara está al frente de la tienda a día de hoy, detrás de un mostrador donde le podemos pedir todo tipo de complementos de valenciana: aderezos para todas las edades y estilos, desde el más simple y económico, hasta los de oro hechos a mano. Manteletas, delantales, peinetas labradas por manos artesanas, camafeos, abanicos de hueso…

La imagen de cualquier santo de nuestra devoción, medallas, figuritas para el belén, crucifijos, cordones de hábitos y una gran variedad de rosarios.

Un paraíso para abuelas y nietas, donde pueden encontrar agujas especiales, hilos para pasar collares y un sinfín de abalorios para crear los más originales gargantillas y pulseras. Es una tienda mágica, que se adapta a las exigencias y necesidades de moda, pero conservando su sabor añejo, vendiendo, ¡Incluso algunos artículos tan antiguos como la misma tienda!

Sin lugar a dudas, en la Tienda de las Ollas de Hierro, puedes comprar de todo…

¡¡¡Salvo ollas de hierro !!!

Texto de Isabel Balensiya

3 comentarios:

  1. Como de costumbre, muy interesante el comentario, nunca te acostarás sin saber una cosa más. Un abrazo y buen día Gregorio .

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  2. Preciosa toda la explicación y el recuerdo. Yo conocí la tienda siendo niña y también es cierto lo que dices, he vuelto a ir muchos años después, en varias ocasiones con mis nietas.

    Gracias Julio

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  3. Amparo y Gregorio, un comercio que tiene mucho encanto. Por cierto y como sabéis, uno de mis Rincones de Valencia.

    Gracias a los dos.

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