Foto de Pedro Blasco
1960 - Con la Resurrección del Señor llega el Día de Gloria y el
ritual de la Semana Santa se convierte en reuniones de jóvenes familiares y
amigos que, durante los "tres dias de Pascua", iban a correr la mona a la ermita de Godella, a Benimamet, a la Fuente del Jarro, al camino de Tránsitos junto a San Francisco Javier, y algo más reciente a la Pista Ademuz, en obras por su apertura. Y por supuesto al rio: a cantar la tarara:
“El día de Pasqua
Pepito plorava perque el caxirulo no se li empinava”.
Recuerdo Casa Pedrito, único kiosco con el de la Estación, llena de cachirulos para
quienes no los sabían hacer.
Y junto a la mona con su huevo duro estrellado en la frente
del más bien "enemigo", en la ocasión, que amigo, además del disfrute que los juegos
pascueros producen como escenificación más tradicional de “la alegría de la huerta”: “a la una pare la lluna, a les dos pare el
sol, a les tres pita el tren”, los de cuerda y los de prendas, surgen los “campeonatos de cachirulos” como el
que nos ocupa la imagen que se llevó a cabo en 1960 en el barrio de Benicalap.
El lugar y la entrega de premios fue en la calle
Pintor Matarana -hoy Mercadona- que se adivina rodeada de huerta, incluso con una
barraca al final del carrer Xocainet, la de los Oreros. Don Juan Blanquer, cura
párroco de Benicalap y Don José Ibancos Bru de Santa Rosa de Lima, los organizadores que otorgaban los premios.
El cachirulo que muestra Pedro Blasco, hecho por su tío
Victor, su padrino, acompañado por su primo Vitorín, se hizo merecedor del
segundo premio, gracias a los dos rollos de hilo, cuerda de palomar que les
acompaña, que fueron soltados en su totalidad.
El vencedor fue Tuset, aunque su cachirulo no aparece en la
foto al terminar rompiéndose; con seguridad la novedad del celofán con el que estaba confeccionado no resistió la fuerza del viento que sí mantuvo el que lucía un cartel de la IV Feria Internacional del Campo.
La chicas que aparecen en la foto son las campeonas de un
concurso de huevos decorados, y los panquemados, los obsequios para los
premiados.
Cachirulos que confeccionábamos con cañas secas guardadas para
que se secaran, pegamento con harina y
“cuas de trapo”. Recuerdo un año que al no tener “prou cua” puse la
zapatilla de un amigo: hizo “fil trencat”
y no lo encontramos.
La "mona de Pascua" y a bailar la tarara:
¡A María le vamos a dar
chocolate con aguarrás,
a su novio le daremos
chocolate con veneno.
¡La Sra. María …qué creída está!
Texto de Pedro Blasco
Curioso....
ResponderEliminar