Archivo Municipal
1940 Ca. - La llegada a Valencia a través del río Turia de la madera del marquesado de Moya y de la serranía valenciana era todo un espectáculo.
Antonio José Cavanilles mencionaba que su paso por los cañones de Chulilla era
un acontecimiento interesante. Pero su llegada al “cap i casal” no lo era
menos.
Una vez vencido el azud de Rovella de 1686, el cauce permanecía libre
de obstáculos hasta el Puente de San José y el paseo de la Pechina era el lugar
apropiado donde los vocales de la Junta de Murs i Valls acudían para inspeccionar el paso de las maderadas en su entrada en la ciudad.
Zona que conserva sus canapés o bancos de piedra construidos por el solaz existente. Entre ellos y
el de mayor ornato el conocido como “el navío”, estaba situado al final del primer
tramo del pretil derecho (el izquierdo estaba ausente de pretiles hasta el puente
de San José) donde se producía una pendiente con bajada al río. El nombre se
debe a su respaldo que nos recuerda la popa de un barco con la leyenda “estoy
aquí para que descanses”, indicando el año de 1757.
"Navío" que había sido trasladado a los Jardines del Real y tras unos años de estancia fue devuelto a su origen del paseo de la Pechina en 1931.
"Navío" que había sido trasladado a los Jardines del Real y tras unos años de estancia fue devuelto a su origen del paseo de la Pechina en 1931.
En las fotos de la década de los 40 se observa “el navío” en fase de remodelación. Junto a él, un banco barroco de 1756 utilizado por los vocales de la citada Junta, que en la actualidad se puede contemplar frente al colegio "9 de Octubre". Obras que una vez concluidas
fijarían una bajada al cauce, a semejanza de la antigua, hasta la riada de 1957 que la arrasó.
En la actualidad y desde principios de los sesenta del
pasado siglo se conserva la pétrea popa en el jardincillo frente al Palacio del
Temple, junto al pretil del río que su original naturaleza y función ornamental
aconseja.
El rio Turia, desde su llamado parque de cabecera hasta Nazaret, es un puro museo. Es para hacer una ruta en toda su longitud para ver e interpretar, cada uno de sus detalles. A una gran cantidad de esos detalles, yo les llamo las "cicatrices del Turia". Muy buen trabajo documental e impagable foto. Germán Gómez.
ResponderEliminarGerman Gómez, tienes razón, sólo se puede entender Valencia y su crecimiento gracias a los pretiles del Turia. Nuestro gran monumento. Desconocido y poco estudiado con detalles sorprendentesobre. Acepto el envite.
ResponderEliminarUn abrazo
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