Archivo Muncipal (1920)
Como todos los Domingos por la tarde, iba la abuela con los
nietos a los Viveros, (siempre se decía los Viveros), para que los niños dieran
rienda suelta a sus juegos y carreras. Camino hacia el Puente del Real,
obligado era, el hacer una parada en el Pouet de Sant Vicent, para que los niños
bebieran el agua de la fuente, con aquellos vasos de aluminio cogidos con una
cadena, para que nadie se los llevara.
De paso la abuela contaba a los pequeños
infantes, las saludables propiedades de aquellas aguas milagrosas, y que los
niños bebían de un tirón y sin chistar, mientras de reojo miraban y escuchaban
a la abuela.
Por una puerta que hay a la
derecha de la mencionada fuente, bajando por una escalera, se encuentra el pozo
que suministra (suministraba) el agua a la fuente; hace unos años, salió una
noticia, que el pozo ya no tenía agua, su nivel freático había desaparecido,
debido a los sótanos de unas cercanas
fincas, edificadas en la plaza de Tetuán.
Me resisto a creer, que ello sea así,
pero nos queda la bella historia del Pouet de Sant Vicent Ferrer, y de aquellas
felices tardes con la abuela.
Texto: Germán Gómez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario