Terminada la guerra civil española se entró en un periodo generalizado por la escasez de los alimentos más necesarios para la población. Ello fue el motivo de establecer por orden Ministerial un sistema de racionamiento para los alimentos más vitales y escasos, como lo eran el llamado pan negro, el azúcar, el aceite, el arroz, las legumbres, así como determinados productos cárnicos.
De esta importancia se crearon dos tipos de cartillas que aseguraban al menos la ración alimenticia teniendo en cuenta al mismo tiempo el tipo de población a la que era asignada, como era el de la edad de las familias y de su número, de cuya regulación se ocupaba la Comisaría General de Abastos. El sistema implantado dio ocasión al nacimiento de un mercado negro de la mano de los estraperlistas, debido, principalmente, a la mala calidad de los productos alimenticios que se procuraban.
El sistema estuvo vigente hasta 1952, pues avanzada la década de los cincuenta iban apareciendo en el mercado los productos de primera necesidad, principalmente en número y mejorando posteriormente en calidad.
De esta importancia se crearon dos tipos de cartillas que aseguraban al menos la ración alimenticia teniendo en cuenta al mismo tiempo el tipo de población a la que era asignada, como era el de la edad de las familias y de su número, de cuya regulación se ocupaba la Comisaría General de Abastos. El sistema implantado dio ocasión al nacimiento de un mercado negro de la mano de los estraperlistas, debido, principalmente, a la mala calidad de los productos alimenticios que se procuraban.
El sistema estuvo vigente hasta 1952, pues avanzada la década de los cincuenta iban apareciendo en el mercado los productos de primera necesidad, principalmente en número y mejorando posteriormente en calidad.
Muy interesante la explicación de una situación que por desgracia le toco vivir a muchas personas de este país , en una época en la que el hambre, la miseria y enfermedades como la tuberculosis, castigaron aún más a un país que acababa de salir de una trágica confrontación . Esperemos que no tengamos que sufrir otra vez esos racionamientos , aunque tal como están las cosas, no lo se, aunque habrá que ser positivos. Gregorio.
ResponderEliminarGregorio, lo importante no es la situación en sí, sino como en tantas otras veces superar los momentos de penuria con el esfuerzo necesario.
ResponderEliminarUn abrazo