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jueves, 7 de agosto de 2014

miércoles, 6 de agosto de 2014

¡VAMOS A LA PISCINA!

piscina las arenas

Años 50 – Piscina de las Arenas junto a su Balneario suministrada por agua del mar que igual servía para el baño que para “campeonatos de España de Natación” en sus distintas modalidades, saltos de trampolín incluidos o partidos de waterpolo, como es el caso que nos muestra la foto con una de las porterías encajada en el bordillo.

Cafetería con  un esmerado servicio donde se servía el aperitivo, el vermut de mediodía, ofrecido por unos elegantes camareros atentos a una clientela fiel que disfrutaba de la brisa. O se tostaban al sol, justo encima donde existía un solárium, protegidos por cremas de producción casera a base de aceites que también procuraban un bronceado rápido que estaba de moda. La piel blanca y como señal de una más elevada clase social de los años treinta, había pasado página. La ducha para caballeros y al fondo para señoras, completaban unas instalaciones de gran prestigio estival donde la clase media-alta se arremolinaba entre las aguas, el sol y el refrigerio.


¡Y de dos alturas!.

¡ FELICES VACACIONES !

martes, 5 de agosto de 2014

LA NARANJINA DEL DR. TRIGO

Naranjina del Doctor Trigo, 1932
Archivo de Rafael Solaz

1932 – La Naranjina fue el precedente de refresco de “zumo de naranja sin burbujas” conocido como Trinaranjus, así como la Orangina exprimida del limón e igualmente sin gas.

Un concentrado que sabía a gloria, útil no sólo para combatir la sed del verano, sino como refuerzo vitamínico por las excelencias de la naranja, rica en vitamina C y muy eficaz para los constipados.

Años después y por la calle Sagunto, donde el Dr. Trigo tenía sus instalaciones, accederían al interior carros cargados de naranjas que irían depositando sus restos sobre la calzada, tanto en cuanto desprendían su perfume al igual que su goteo.

Con este publicitario vemos las posibilidades que ofrecía la suntuosa botella que se presentaba en cuatro volúmenes diferentes; la mejor opción para que como en la “multiplicación del pan y los peces”, con una pequeño envase, satisfacer la demanda de los sedientos y hasta en el número de ciento sesenta si los hubiere; que no eran pocos.

Tri de Trinaranjus y de Trigo: el zumo valenciano y “sin burbujas”.

¡ QUÉ BUEN REFRIGERIO !

lunes, 4 de agosto de 2014

LAS ARENAS - ¿PUERTAS AL MAR?

Las Arenas años 50

Años 50 - Las arenas de adentro, las arenas de afuera, decíamos.  Si no se le pueden poner puertas al campo, menos al mar. 

El balneario de Las Arenas era de pago. Módico y al alcance de todos, pero había que pasar por su ventanilla para disfrutar de las numerosas distracciones que había en su interior. Patines y futbolines, columpios y tiovivos servían para entretener las horas del día que se alternaban con los baños.

Flanqueado por una vallas de tablas que no impedían su acceso, pues a través de las olas se pasaba al interior. Eran tiempos en los que “la moral” se pavoneaba celosamente por la playa a la caza del exigido recato, tanto en cuanto se requería a las féminas la faldita en su bañador fuera del agua, al tiempo que otra valla en el interior del recinto, separaba a las damas deseosas de más intimidad de los “atentos” caballeros.

Años de vacaciones en las playas del Cabanyal, cuando aun faltarían muy pocos años para que el Seat 600 se instalara en nuestras vidas.

domingo, 3 de agosto de 2014

EL RESTAURANTE LOS VIVEROS EN LOS JARDINES DEL REAL

restaurante antiguo 
Los jardines que formaban parte del Palacio del Real, una vez destruido éste en la guerra de la Independencia, con motivos tan poco claros como inútiles, se convirtieron en una zona verde, de ocio y de paseo de la sociedad valenciana.

La propiedad pasó del Real Patrimonio a la Diputación Provincial, que finalmente en 1903 lo donó al Ayuntamiento de Valencia como plantel de flores o vivero de árboles.
interior
Colección particular de Pilar Martínez Olmos

REVI, S.A. (restaurantes viveros, sociedad anónima), nació para explotar un restaurante en el interior de estos jardines. La propiedad de las acciones de esta sociedad anónima variaba, pero familias muy conocidas de la jet set valenciana siempre formaban parte de ella.


restaurante viveros1- Colección particular de Pilar Martínez Olmos

La primera ubicación del restaurante, con su umbráculo anexo, era lugar de bodas, bautizos, comuniones y celebraciones, tanto en su interior como en patio exterior formado por un pasillo con doble columnata.

1952 bailes papas
A final de los años 50, el arquitecto Luis Gay, construye un edificio de estilo racionalista, con un jardín interior a fin de ubicar en él, un restaurante de lujo.

Su uso era el mismo, pero además de un gran salón y en época de buena temperatura, mesas alrededor del jardín, contaba con un salón privado en el piso superior donde se podían hacer convenciones, homenajes, y otras celebraciones de menos invitados.

Sin embargo, la mayor parte de su factura provenía de la contratación con anterioridad.

En los primeros años 70, en el ala derecha del edificio, se inaugura “el anfitrión” un restaurante a la carta, elaborada en las mismas cocinas y prácticamente con la misma materia prima, pero muchísimo más caro y exclusivo.

La crisis de finales de los 70 acabó con él. 

No así con el edificio, que hoy en día, está destinado a Museo de Ciencias Naturales de Valencia.
Colección particular de Pilar Martínez Olmos

niños Colección particular de Pilar Martínez Olmos

Y ya que yo he escrito este artículo, me gustaría añadir una opinión mía. Hace muy poco, coincidiendo con la feria del Libro, entre en el Museo. Era un día precioso, hacía calor. Cuando traspasé la puerta la oscuridad se apoderó del ambiente. Todas las cristaleras que daban luz al restaurante desde el jardín interior, estaban cerradas y/o tapadas por espesas cortinas azulonas.

Consiguientemente el techo sembrado de halógenos, allá arriba, dando un aspecto de cueva al hall. Seguí recorriéndolo, el gran comedor, dividido en boxes oscuros con televisiones y audiovisuales hablando solos…Sentí una lástima infinita y desee que aún podía tener arreglo.

Y pienso yo si está acertado el uso de un edificio tan alegre, para tener que convertirlo en algo tan oscuro. O es que no tenemos ni idea de utilizar óptimamente lo bello que poseemos.

restaurante viveros

Texto de Pilar Martínez Olmos

sábado, 2 de agosto de 2014

NUESTRA SEÑORA DE LOS ANGELES: EL QUINARIO

Nª Sª de los Ángeles del Cabanyal. 1969

Archivo de Rafael Solaz

1969 – La festividad de Nuestra Señora de los Ángeles se celebra en el Cabanyal con especial atención a los rezos del rosario y del ángelus, así como en la ejecución de diferentes actos culturales. El día 28 de Agosto, se corresponde con la fecha del inicio de su quinario y un repleto programa en el que no falta el canto a los  Gozos de la Virgen una vez celebrada la eucaristía. El día grande a su Virgen es el 2 de Agosto que comienza con el tradicional rosario de la aurora, la misa de Alba, y otras actuaciones que finalizan con la vespertina procesión por sus calles. 

Virgen, la de Nuestra Señora de los ángeles, que a su vez es Cotitular de la Real Cofradía Jesús en la Columna, de la Semana Santa Marinera. Se cierra la fiesta con un castillo de fuegos artificiales.

En la foto de 1969 vemos la imagen de la Virgen con sus ángeles en fervorosa representación, semejante a la que por ella sienten los fieles de tan popular barriada.

viernes, 1 de agosto de 2014

LA FOTO COLOREADA

Las Arenas. Ca. 1925
Archivo de Rafael Solaz

Ca. 1925 - La fotografía que desde su invención abría un nuevo camino al arte, a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX alcanzó un notable desarrollo gracias a los tratamientos químicos y manejo de lentes, placas y transparencias que los grandes propulsores del nuevo descubrimiento llevaron a cabo. 

Con el inicio del siglo XX se consiguió la primera foto en color patentada por los hermanos Lumiére, al tiempo que en un intento de dar colorido a la fotografía, el recurso al coloreado a mano fue llevado a cabo por los más osados en su pretensión de reflejar en el papel una mayor autenticidad a la imagen. Costumbre que por su novedad y por la perfección lograda entonces, producía un gran impacto a quienes se entusiasmaban por los avances en el mundo de la fotografía.

Llegaba el verano y las casetas frente a la playa, junto al balneario de Las Arenas, se alineaban dispuestas a recibir a los bañistas que buscaban el alivio del mar. 

La foto coloreada torno a 1925 es una muestra de aquella costumbre que perduró en las primeras décadas del siglo.